jueves, 1 de octubre de 2009

"Sólo tengo ojos para ti"

"Sólo tengo ojos para tí
no te das cuenta, no lo has notado
Y te quiero más de lo que hoy puedo decir
Sólo tengo ojos para tí


Sólo busco el tiempo para tí
vaya manía de estar a tu lado
y lo eterno cabe, en tu minuto enamorado

Sólo tengo ojos para tí


Te veré como siempre en el rincón
donde guardo el corazón y tan sólo vives tú

y aunque el mar pierda una orilla
y el comienzo su partida
sólo tendré ojos para tí."

(Juan Luis Guerra, "Sólo tengo ojos para ti").

La identificación con la montaña rusa ha sido, sin duda, lo que podría decirse que han sido estos días... un contínuo pasar del éxtasis al más completo derrumbe, asi una y otra vez... hasta ahora. Lo dejaré claro, ésto que describo de estos días no tiene nada que ver con el amor, ahora me refiero a temas "profesionales". Me quedé sin plaza para la carrera que quería, luego me dijeron que podría entrar (pero ya en el 2º ciclo) en la que ahora has empezado tú, cuando fui a echar la preinscripción vi que tampoco había plazas ahora. Finalmente, he encontrado otra carrera que no me termina de convencer. Lo cuento todo muy rápido porque no quiero extenderme con ésto, pero bueno, sigo no teniendo muy claro si irme a vivir a la Sevilla aun teniendo ya firmado el contrato y todo para hacerlo y esto... sigo tan liado como siempre en ese aspecto, nunca supe muy bien qué hacer con mi vida profesonal... :(

Bien, aparte de todo ésto he tenido otras preocupaciones que me han venido quitando el sueño, agotándome poquito a poco hasta que, y ya estaba tardando, por fin he terminado cayendo resfriado jejejeje. La semana pasada tuviste que vivir algo muy desagradable, precisamente tú, que sigues pasando por un mal momento y estás tan agobiada con todo esto de tener que irte a vivir fuera. Te robaron el bolso con tus cosas (entre ellas la camisetita de goma que te regalé para las llaves) y, aunque en aquel momento, mientras no te diste cuenta de la situación realmente, fuiste muy fuerte, todo eso te ha venido preocupando cada vez más y se ha unido a todo lo que ya tenías en tu cabecita...
Pero bueno, el finde te vi muy bien, el viernes me mandaste un sms para preguntarme si salí pero estaba acostado (con el disgusto de no poder entrar en la carrera despues de toda la tarde pataleando en mi casa jajaja), te pregunté que si había gente para que esa fuera mi excusa para salir y verte, es mi mejor remedio para recuperar la sonrisa. Pero bueno, al final tampoco sali ni nada, ya nos veríamos el sábado... y así fue, y te vi muy bien, contenta, con tus cosas de siempre y eso, todo normal. Pero bueno, llegó el lunes y empezaste las clases, mi plan era mandarte una canción por privado que te gusta mucho, la de "Hoy todo va a salirme bien", de el Arrebato, pero no me dió tiempo de llegar a casa y poder mandártelo para que lo vieras antes de irte a clase. Afortundamente siempre tengo un "plan b", la noche antes cogí mi antiguo móvil, me pasé una imagen que tenía ahi y que ya te mandé una vez hace tiempo, ese icono de las cejas que tan nuestro es y tanta gracia nos hace. Te lo envié 5 minutos antes de que entraras a tu primera clase, aunque sabía que existía la posibilidad de que no te llegara como me ha pasado con otros mms, más ahora que tienes un móvil más viejo porque el tuyo te lo robaron con el bolso... y, sí, efectivamente no te llegó.
Pero bueno, por la noche me contaste lo mal que estabas. Jamás pensé que te sentirías asi en tu primer día, nada que ver con las clases. Por supuesto, no voy a escribir aqui nada de eso, simplemente que sentí una impotencia enorme, saber que estabas tan lejos, pasándolo mal, llorando, y yo no podía hacer nada para ayudarte, igual que cuando me contaste al día siguiente lo de que te robaron... está claro que me da miedo que estés tan lejos y yo no pueda hacer nada para ayudarte o, de alguna manera, protegerte de todo eso. Es eso lo que me mata a veces por dentro, lo que estos días me ha tenido pensando y pensando a todas horas, y saber que lo único que puedo hacer mientras pienso eso es llorar porque parece ser que no puedo hacer nada por ayudarte. Aunque bueno, realmente sí que puedo y, he intentado hacerlo lo mejor posible. Te he intentado consolar cuando yo mismo estaba temblando al saber que estabas mal, te he intentado animar cuando era yo quien no paraba de llorar... tengo que ayudarte en todo lo posible y lo haré, no estoy dispuesto a que sufras y te agobies con todo esto, haré todo lo que pueda para que te adaptes lo mejor y más pronto posible a tu nueva vida fuera de casa aunque también sé que tú no quieres preocuparme más de la cuenta contándome estas cosas...

Sólo tengo ojos para tí y no quiero verte triste, quiero que recuperes tu sonrisa, esa sonrisa que contagias, esa felicidad que desprendes, esas cosas que sólo tú tienes y que sin ellas no podría vivir, porque tu felicidad es la mía y porque tus preocupaciones y problemas también están en mi cabeza, quieras tú o no quieras. Sé también que a veces te hace sentir un poco incómoda que sea así contigo, que te hará pensar que no debes dejar que yo esté a todas horas pendiente de tí porque tú crees que no puedes hacerme feliz como yo estoy seguro de que sí. No voy a dejarte nunca sola mientras sepa que algo te hace mal y, muchísimo menos, voy a hacerlo ahora. Siempre que lo necesites voy a estar contigo. Siempre voy a estar ahi para pintar en tu cara esa sonrisa que tú siempre logras pintarme a mí, ojalá tuviera esa misma capacidad que tienes tú en mí para dar claridad al día más oscuro pero bueno, no te voy a dejar ahora que necesitas tanto a ese amigo que fui no hace mucho y que tanto bien te hacía.
De cualquier manera, esto no quita que pueda seguir soñando con que suene ahora mismo el teléfono y seas tú gritándome que te has dado cuenta de que me quieres, siempre sueño con que todo sea como en una muy bonita y feliz película de amor. Que un día cualquiera me sorprendas diciéndome que tú también estás enamorada de mí y, en ese momento, yo pueda decir a voces que soy la persona más feliz que pueda haber en el mundo.
Me encantan esas sorpresas tuyas cuando te da esa vena "rosita" y quieres decirme gracias por todo lo que hago por ti y me recuerdas que me quieres, como lo hiciste anoche despues de habernos reido tanto y hablar por el msn. Me mandas un mensaje al móvil después y me dices que me quieres mucho, aunque inmediatamente después pongas la palabra "amigo" muy prudentemente por tu parte jajajajaja. Me encanta verte feliz, me encanta soñar con que yo sería esa persona que te devolverá la sonrisa y te hará sentir la persona más feliz y más fuerte del mundo, porque tú tampoco eres normal en mi vida y porque conocerte a ti si que ha sido una de las mejores cosas que me han pasado en esta vida. Ojalá no hubieras tenido ni tuvieras miedo a veces y quisiéras andar y soñar conmigo, saber que juntos todo sería perfecto.

Pero bueno, sé perfectamente que no es nada de eso lo que necesitas ahora, no estoy dispuesto a volver a estropear nada entre nosotros ni pondré en juego la confianza en mí que, parece ser, has vuelto a recuperar. Seguiré siendo para ti lo que necesites. Siempre voy a estar contigo, siempre voy a tener ojos para ti, siempre estaré dispuesto a regalarte una sonrisa, a ser tu hombro para llorar y, por supuesto, a recordarte las muchas razones que tienes para ser feliz... y tampoco nunca voy a dejarte sola si me necesitas. Yo también te quiero, amiga mía. Te quiero tanto que el resto del mundo parecen no importar, tanto que sólo tengo ojos para ti.
Sigo sin poder vivir sólo del aire, sigo necesitando tu alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario